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Entrevista con El Shirota


Fotos: Alan Cortés | @alancortest

De la escena underground mexicana, de las bandas que más han generado ruido (casi literal) es El Shirota: el cuarteto originario del Estado de México que con su sonido experimental, psicodélico, oscilante entre amalgamas de garage, punk y noise, que ha pasado de ser uno de los secretos mejor guardados del país, a conquistarlo. Llenándonos de una adrenalina adictiva y de un caos perdido en una bella distorsión, que revienta bocinas y tímpanos, El Shirota es una banda que evoca una envidiable aura enérgica, con caos un alarido, honesto y justo, de carácter retro y distorsión a máximo volumen… Lo son todo en uno. En el 2013, con el lanzamiento de su primer EP, Chiluca No Es Satélite, la historia del Shirota comienza a escribirse y a salir a la luz, pero tuvieron que pasar siete años, para tener su primer álbum de larga duración y créanme, la espera valió la pena. Explotando la esencia de la banda, Tiempos Raros no conoce la monotonía y demuestra que de una imprescindible simpleza, pasan y juegan también con los estruendos, entre tintes de un extraño post-hardcore y melodías muy al estilo del rock de los 90s, que sin duda entusiasman con su versatilidad sonora. Ahora, con un 2020 extraño y de tiempos raros, el nuevo álbum del Shirota armoniza toda la catarsis y ambigüedad, haciendo que la vida se vuelva una locura más amena. A unas horas de su lanzamiento, platicamos con Ignacio Gómez (vocales y guitarra) y Gabriel Mendoza (batería), que con un sentido atemporal y diferentes temáticas que abordar, nos comparten los detalles y experiencias que le dieron vida a Tiempos Raros, sus secretos y significados, sus influencias y artistas favoritos. La historia de la banda ‘El Shirota’ es larga, ha pasado por mucho y muchas alineaciones, pero sí tuvieran que escoger su recuerdo favorito de ustedes haciendo música juntos, ¿cuál dirían qué es y por qué?

Gabo: El Posadelic, ahí recuerdo estar tocando y cuando terminamos nuestro set, estaba John Dwyer de Oh Sees viéndonos y dije: “aquí esta la competencia”. Nacho: Al parecer, el Posadelic es un festival que le gusta poner artistas en el horario que se le hincha la gana, porque en otros festivales no ponen bandas emergentes, como nosotros que apenas empezamos a darnos a conocer y que curiosamente, se dieron el lujo de ponernos a tocar como a las 10 de la noche. Eso es algo que no nos pasa seguido. Primero, para nosotros es un privilegio y un honor; en segundo, está interesante que pudimos experimentar lo que es tocar en ese horario y exponerte a tanta gente, tocar antes de una banda que llevas siguiendo desde hace un rato. Que en lo personal, cuando empiezan a tocar, dices: ¡orales!, esto esta bien en serio y son impresionantes. También, tenemos una experiencia en común como banda y es haber tocado en un lugar muy curioso llamado Altepexi en Tehuacán, de toda la historia de la banda, ese ha sido el lugar más interesante que he tocado en mi vida. Tocamos en una casa en obra negra y realmente fue gente en un pueblo en medio de la nada en Puebla. Esas experiencias y este tipo de shows, me dan conocimiento de la realidad de mi país, de convivir con la gente que le ofrece venir a ver una banda que va a tocar y todos vienen a ver de que se trata aunque no tengan idea de quién es.

Al anunciar su primer álbum, lo hicieron con una playlist especial y que recolecta las influencias, bandas y artistas favoritos de cada uno de ustedes. En Tiempos Raros 🏠, hay de todo: desde ‘Sonic Youth’, ‘Nirvana’, ‘HAIM’, 'J Balvin’… ¿Cómo fue la dinámica de hacer la playlist?

Gabo: De los cuatro individuos que conformamos este colectivo musical, somos únicos en gustos y preferencias. Afortunadamente, concordamos en esto de la música como banda, pero si platicas con cada uno de nosotros, te darás cuenta que venimos de lugares diferentes: de porqué comenzamos a tocar, nuestras influencias inmediatas, los rangos de edad y las épocas. Eso es lo que hace que El Shirota, sea El Shirota, por lo menos en lo que se oye hoy en día y como se terminó reflejando en el disco. Ha habido discusiones al respecto, porque sabemos que El Shirota tiene esta línea de estética musical y que se trata de respetar. Al día de hoy, somos tan diferentes y respetamos a cada individuo, hemos despertado para ver cómo manejaremos esta línea en relación a nuestras diferentes influencias. Además, ¿cómo le hacemos para sacar material digital ahorita?, y queríamos hacer una playlist, con canciones que nos están influenciado directamente y que nos mantengan creativos durante esta cuarentena. En mi caso, lo que me ha estado inspirando es el punk de los 80s. Hay ciertas bandas que Nacho tiene muy claras como referentes. David, no sé en qué mundo vive que llega a tener una influencias raras. Es muy interesante. Nacho: Me gusta que en la curaduría tienes completa libertad. Con esta selección puedes conocer a los individuos no solo por cómo suena su música. En la post modernidad, lo más inmediato para familiarizarnos con algo son las referencias de la cultura pop. Podemos hablar más de quienes somos y la variedad de gustos que tenemos a la hora de crear. Aunque no lo parezca, toda esa diversidad nos inspira, de manera hasta un poco subliminal y el hecho de estarlas escuchando, hace que se cuelen aunque no quieras. Es el reflejo menos pretencioso que hay a la hora de hacer música.

Finalmente tenemos un álbum debut del ‘Shirota’, ‘Tiempos Raros’ demuestra que valió la pena, pero, ¿qué representa el nombre tiempos raros?

Gabo: No estaba planeado a que saliera ahorita, que sí es un tiempo tan extraño ¿no? Sino, tal vez se llamaría: Tiempos de Incertidumbre, ¿Qué rayos está pasando?, Vete a la… Ve como es esta cuestión circunstancial del ser humano y de la sociedad, que va pautando ciertos parámetros que se reflejan, pero terminamos de grabar el álbum a finales de diciembre del año pasado y entiendo como se pueden relacionar con la actualidad, hasta con la lírica que Nacho plantea en el disco. El título puede llegar a ser emblemático, pero vivimos en tiempos raros desde siempre y ahora termino siendo de la manera más obvia. El disco termino siendo Tiempos Raros, en el tiempo más raro que pudo haber salido. No sé si Nacho controlo todo inconscientemente o si fue el primero que estornudo en México, no lo sé. Nacho: De repente hasta parece oportunista, pero lo curioso es que teníamos que cerrar carpeta en enero de este año. Yo estaba coordinando el arte de la portada y queríamos proyectar un poco sobre lo que estaba pasando, al final el disco es un reflejo de lo que estábamos pasando en nuestras vidas. Para nosotros, lo que paso el año pasado fue un momento de cambio por completo: pasamos de ser una banda que nadie volteaba a ver, a una banda a la que le dicen que tiene la canción numero en Reactor, una banda a la que por fin se había acercado un sello para trabajar con nosotros. Por ahí fue lo raro del tiempo. Además, de que un día te levantas, es 2-3 de enero y te dicen que va a ser la Tercera Guerra Mundial bioquímica. Por un lado, tus preocupaciones van a sacar un disco y por el otro lado, te dicen que el mundo se va a acabar, que está colapsando y que debes poner tu atención a eso. Qué es justo lo que está pasando ahorita, es la importancia de la música, porque nos ayuda y todo, pero al final es existencial, hay problemas afuera de los que también necesitamos hablar. El mundo nos está pidiendo a gritos que hablemos y nos expresemos, porque si nos quedamos callados, nada va a cambiar. La música, en parte es eso, hablar de lo que sientes y de lo que está pasando en tu entorno, cuestionarlo. Pensar de una forma más consciente qué es lo que está pasando.

En ‘Tiempos Raros’, hay algunas canciones que tienen títulos muy específicos y que su misterio me causa mucha curiosidad. Empezando por la canción que significa ‘El Shirota’ al revés, ¿cuál es la historia de “Atorihs Le”?

Nacho: Es un secreto que no podemos revelar. Gabo: Hay que marcarle a David. Nacho: Exacto, está seguramente en reversa. Tendrás que marcale directamente a David para revelar el secreto. Ok, me encargaré de eso. Ahora, ¿qué significa “RTL” y cómo se relaciona con su sonido?

Gabo: Es una cuestión de derechos y por eso no pudimos llamarla como nos hubiera gustado. Nacho: Solo te puedo decir que es una oda a Metallica, a uno de los discos del rock de los 80. Es como el meme, RTL es un acrónimo; así como AMLO es un acrónimo, RTL es una situación similar. Gabo: Dentro de toda esta dinámica, cuando comienzas a escribir canciones, lo primero que llegas a tener en la mente es un chiste local, un riff que se parece a tal rola o lo que sea y dices: “hay que ponerle así, para acordarnos de cual es”. Dentro de la lista total de nombres provisionales de canciones del disco, quedaron un sinfín. “RTL" se pulió el chiste local para poderla dejar ahí, al igual que “Atorihs Le”. Nacho: Hay una versión oscura de “Carretera Furacão” en el YouTube de nuestro ex-bajista, también tiene un acrónimo que es MOP y creo que de ahí pueden entender todo el cotorreo. Tiene que ver con que “RTL”, es un reflejo de “Carretera Furacão”, en un contexto en que no es ni sencillo, ni tiene letra, que va completamente por otra onda. De entrada porque Gabriel toca diferente la batería, es otro groove, otro estilo. También fue más de experimentar con lo que podemos hacer en producción y divertirnos con ello, sabiendo que no podremos replicarlo en vivo y que cuando lo hagamos vamos a darle un nuevo universo.

¿Quién es “El Bob Rosendo”?

Nacho: Gabriel no ha tenido la oportunidad de conocerlo en persona, pero David y yo sí. David tiene una conexión muy interesante con la cultural Huichol de Guadalajara, Jalisco, y uno de sus mejores amigos de la universidad se convirtió en aprendiz de la cultura Huizarica, que tiene que ver con el peyote y esa mitología, y más allá de una creencia, realmente creo que es una cultura. Había una ceremonia que estaba por suceder en ese entonces, con un personaje que se llama Rosendo y la invitación decía que era con Bob Rosendo, haciendo alusión a Bob Ross. Así que Bob Rosendo nos conoció y un amigo le pidió al fuego: “Mis amigos del Shirota, que su música se proyecte a mil watts”, fue muy gracioso porque Bob Rosendo le dijo que debería ser más y más, él quería que nuestra música sonora fuertísimo. Nos estaba echando buenos deseos; así que, cerrar el disco con esta canción, fue parte de un chiste local. Él es el Bob Rosendo, un gran personaje y que esperemos ande con bien y con salud. Me parece curioso que es de las creencias que protege el gobierno mexicano, el peyote y el jícuri que llaman ellos, como toda esa cultura. Viene gente de todos lados del mundo a conocerla, porque realmente le interesa y es que es algo que no todos los países tienen. En México sí, tenemos una sabiduría milenaria que igual, si no nos la vamos a apropiar, por lo menos debemos conocer y vivirla alguna vez. Pero, “El Bob Rosendo” es un reflejo de nuestro sentido del humor, con el tiempo nos hemos ido despojando de la idea de tomarnos todo en serio. El video de “Carretera Furacão” es un claro ejemplo de que nos sabemos divertir con nuestra música, no es súper en serio y súper artístico, a veces hay momentos donde nos gusta divertirnos. La comedia nos parece un buen recurso y creo que Bob Rosendo es un momento bastante chido, cómico y relajado; el disco es muy emocional y por eso, poner esta canción al final transmite este otro lado de nosotros, de los shows, que es el desmadre y el cotorreo.

Tienen una canción favorita en ‘Tiempos Raros’, ¿cuál es y por qué?

Gabo: Creo que ya se contestan casi en automático, entre nosotros cuando viene la canción decimos que es nuestra rola. De entrada, yo te puedo decir que la mía es “A Dónde Voy”, desde que llegaron con ese riff, sabía que me encantaría esa canción. De que, esta es, esta es la canción. Así de tanto me gusta, que si yo hubiera visto a otra banda tocando esta canción en vivo, yo diría que está cabrón ser el bato que está tocando esa rola y me gusta ser yo el que está tocando esa canción. Nacho: “¿Cuánto Falta?” es mi favorita del disco, y es que es una canción que se me hace interesante y relevante, porque logramos manejar estos dos polos: la inquietud por esta experimentación con los feedbacks, con los ritmos duros y con esta potencia de los watts, de los amplificadores y que por el otro lado, maneja dinámicas. Gabriel ha venido mucho a instaurar esta escuela de las dinámicas, de tener hacia arriba y hacia abajo en una canción. “¿Cuánto Falta?” fue muy ambiciosa por todos los arreglos y a la vez, fue con las que no nos rompimos tanto el coco, fue fácil de descifrar y salió natural. Es de esas canciones que se vuelve una máquina espesa de instrumentos, que puedes sentir perfectamente y hay una conversación entre las guitarras, que están oleando entre ellas a lo idiota como por minutos. Gabo: Creo que a Rubén, su favorita es “RTL” y él le apuesta a “RTL”. Recuerdo que cuando estábamos grabándola, Rubén era como mi coach y es que como dura muchísimo, luego estar tocando el mismo ritmo no me gusta, pero él estaba ahí dándome porras. ¿Cuál será la rola favorita de David? Nacho: El “Bob Rosendo” es la favorita de David, es una rola muy David. Así de que soy fan de los Misfits hasta la muerte. El crecimiento del ‘Shirota’ en los último año ha sido impresionante, han llegado a diferentes partes del mundo. Recuerdo haber visto un tweet en japonés hablando de ustedes, ¿cómo se sienten al respecto?

Nacho: Durante mucho tiempo nos reíamos, de que cuando vayamos a Japón sería muy gracioso y sobre cómo dirían nuestro nombre. Ahora ahí están los tweets y hay reseñas que hablaban de nosotros en japonés. Eso es lo que buscábamos al trabajar con Devil in The Woods, de alguna manera internacionalizarnos, porque cuando empiezas una banda independiente, de lo más difícil es salir de tu país. Muchos conocemos proyectos que se escuchan solo en México, pero de ahí, a qué salten y los escuchen en Estados Unidos, en otros lados y partes del mundo, está muy difícil.

En este momento, con las complicaciones en el mundo y en el país, ¿cómo están? ¿qué papel dirían que tienen en esta época de cuarentena y transición?

Nacho: Me pasaba mucho, incluso antes de la cuarentena, que había dejado de leer y ahorita, tengo como ese sentimiento de que si no lo hago, estoy perdiendo el tiempo y que no estoy haciendo nada, cuando podría estar grabando una canción por ejemplo. Así que he tratado de leer, no solo como novelas y cosas así, en general de todo: periodismo, críticas, ensayos y eso que llaman non-fiction. Más ahorita, que estamos expuestos a tantas noticias todo el tiempo, como que se nos olvida que hay gente que busca comunicar la contraparte de lo que los medios dicen, que contrarrestan y te dan un poquito más de criterio, de visión sobre como se mueve el mundo. Está loco, es un momento rarísimo en el que todo lo estamos viendo a través de la pantalla, ni siquiera estamos saliendo para comprobar si la gente sale o no sale. También, ser ciudadano responsable ¿no? Quédate en tu casa y ponte las pantuflas, ponte cómodo, pero también se productivo. Te das cuenta que tal vez es un buen momento para descansar un poquito del rush de la vida, que nos tenía tan sometidos, demasiado distraídos y agitados, sin tiempo para realmente pensar. Es un momento para estar contigo mismo y hacer cosas que nada tienen que ver con los que estamos acostumbrados. La introspección es otra manera de ser productivo.

Conociendo más a ‘Gabo’ y a ‘Nacho’…

Taco favorito:

Gabo: No soy muy fan del pastor. Me encanta hacerme tacos, si pudiera hacerme un taco de pasta, me hago un taco de pasta, me gusta hacer tacos de todo. Aunque, los tacos de asada en Tijuana y como los sazonan entre más te vas al norte, son los mejores. Esa vez que comimos en Las Ahumaderas, donde Nacho terminó vomitando porque su taco estaba muy picoso, esos son mis favoritos. Nacho: Un taco de pastel de tres leches. Híjole, mi taco favorito podría ser el kamikaze porque te regala la experiencia de trascender, ni la meditación puede lograr lo que el kamikaze hace, ahí sabrás lo que es trascender a otra vida. También, la empanada latosa de Los Latosos de Ciudad Satélite, podría ser el mejor taco: una costra de queso que envuelve el taco de lo que tú quieras. Si hubiera una pelea entre ‘J Balvin’ y ‘Bad Bunny’, ¿quién creen que ganaría?:

Nacho: Yo creo que J Balvin porque tiene ya medio bajado su discurso ideológico. Gabo: Sí es una pelea de flow, definitivamente ganaría Bad Bunny. Porque yo sé que J Balvin en su equipo de productores, tiene gente que le ayuda a escribir sus canciones y esta chido, porque lo vuelve una máquina de hits. A Bad Bunny en su freestyle, uno que otro lyric que le he cachado por ahí, lo hace más creativo.

Nacho: Yo voy a seguir diciendo que J Balvin, porque creo fue el primer artista contemporáneo actual del género trap-latino y reggaeton. Él logró aparecer en la portada de The Fader, ellos se encargan de hablar de esta vanguardia de la música contemporánea y ese es un mérito muy interesante que tiene J Balvin.

Sí pudieran viajar al pasado para ver a un artista, ¿a quién verían?:

Nacho: Wow, está es relativamente sencilla para mí y es que son dos de mis artistas favoritos: Nick Drake y Arthur Russell, porque sus carreras tendieron a no ser muy reconocidas en vida y sin embargo, eran artistas que en su momento propusieron muchísimas cosas y que tenían un talento muy infravalorado. Hay un documental bien interesante de Arthur Russell que se llama Wild Combination, se lo recomiendo ver a cualquiera. Gabo: Honestamente, dentro del cliché, hubiera sido increíble ver a Nirvana en uno de esos shows donde Dave Ghrol sonaba en la batería de manera brutal y verlo explotando en Nirvana, hubiera sido increíble. Fuera del cliché, ver a Fugazi y haber sido de esos batos freaks que vio a Fugazi en su momento, debido haber sido una locura. También, no sé, haber tenido la oportunidad de asistir a estos festivales con los Ramones, Blondie en sus inicios, con toda la vibra y experiencia que podrías estar viviendo. ¿Te imaginas vivir esa escena donde todos están tocando rápido y loco, y nadie sabe como reaccionar?


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