Entrevista con Roby Damian
- Paola Moyado
- hace 2 horas
- 7 Min. de lectura
Habitar los cambios.

Roby Damian es una cantante originaria de la Ciudad de México que busca redefinir el pop desde una perspectiva urbana. La propuesta nace del cruce entre el pop que marcó su infancia en nuestro país y la energía de los ritmos urbanos que la acompañaron durante su vida en Colombia, dando forma a un universo propio: más libre, más emocional y sin etiquetas rígidas.
En el 2025, Roby presenta ‘REGGAETON CUTE (VOL.1)’ y ‘REGGAETON CUTE (VOL.2)’, dos EPs con los que abre su alma artística, fusionando su faceta más melancólica con ritmos irresistibles. Estos lanzamientos marcan una etapa en la que la ternura, la sensualidad y la vulnerabilidad se entrelazan. A través de sonidos que van desde un dembow juguetón hasta un pop nostálgico, la artista explora nuevas maneras de habitar los géneros desde una mirada profundamente personal.
Tuvimos la oportunidad de platicar con Roby Damian sobre su transición del mundo de la actuación a la música, las emociones que atraviesan su arte y lo que significa para ella construir un espacio propio dentro del pop urbano.
RD: ¡Hola! ¿Cómo estás?
Hola Roby, muy bien, gracias. ¿Tú qué tal?
RD: Todo muy bien, aquí andamos.
En este momento traes unos lanzamientos muy frescos: ‘REGGAETON CUTE (VOL.1)’ y ‘REGGAETON CUTE (VOL.2)’ ¿Cómo te sientes luego de mostrarle al público este nuevo material?
RD: Muy orgullosa de todo. Siento que son EPs que me emocionan muchísimo y que definen mucho quién soy. Para mí, era súper importante sacarlo de esta manera porque creo que le da sentido a todo y engloba mucho mejor el concepto de lo que quiero transmitir.
¿Y qué tal el proceso? ¿No ha sido una montaña rusa de emociones mostrar tu trabajo y toda la vulnerabilidad que hay detrás?
RB: Pues fíjate que no tengo tanto filtro con la vulnerabilidad. La verdad, siempre he sido ese bicho raro que se muestra vulnerable, no importa dónde o con quién esté. Y siento que eso se refleja en el arte que hago.
Antes de profundizar en el reggaetón cute, me gustaría regresar a la etapa en la que estabas enfocada en la actuación. ¿Cómo fue ese momento en el que decidiste dar el salto hacia la música?
RD: Siempre quise hacer música; desde chiquita era mi sueño más grande. Pero antes sentía el panorama más limitado, pensaba que debías tener una voz increíble desde el inicio para poder dedicarte a ello. Yo crecí un poco con esa idea y con la sensación de que mi voz no era suficiente para ser cantante.
La actuación es otra de mis grandes pasiones, así que decidí empezar por ahí. Pero siempre tuve esa espinita de querer hacer música, aunque no me atrevía. No fue hasta que tuve un breakdown emocional en mi vida que dije: “siento que me estoy pidiendo desde hace años a gritos hacer música, y por miedo no lo hago”. Fue justo por eso que terminé lanzándome y, ahora aquí estoy, en ese proceso.
A veces los momentos difíciles son el empujón que necesitamos para hacer otras cosas y cambiar el panorama.
RD: Totalmente.
¿Qué herramientas sientes que te dio la actuación que ahora aplicas a tu proyecto musical?
RD: Creo que el poder controlar mis emociones como si fueran llaves de agua, en donde puedo abrir una y dejar que fluyan los sentimientos con una facilidad increíble, me ayuda mucho al momento de escribir. Me permite ponerme por completo en la piel de aquello que quiero transmitir. Como compositora e intérprete, es una herramienta que me ha servido muchísimo. También está lo camaleónica que puedo ser, dependiendo de lo que quiera comunicar en un video o en una canción específica. Puedo llegar a verme muy diferente, y eso le da una energía completamente nueva a mi música. Son carreras súper diferentes, pero creo que eso es algo que definitivamente puedo retomar de la actuación.

Aunque son etapas y momentos diferentes de tu carrera, creo que de alguna forma van de la mano y se complementan. Al ver algunos de tus videos y la identidad visual que llevas, se nota ese carácter de performance y de dramatismo, muy propio de la actuación.
RD: Desde luego, creo que el manejo frente a cámara es algo que, gracias a la actuación, no me intimida. Eso me permite ser más transparente con todo lo que busco transmitir.
Teniendo todo esto sobre la mesa, entremos al concepto de los EPs. ¿De dónde viene la inspiración para experimentar con estos sonidos? Y, ¿cómo fueron los primeros bocetos de este material?
RD: La verdad es que los primeros bocetos son prácticamente que lo que están escuchando. A veces me gustaría ser más clavada, pero no lo soy. Soy una persona que, si algo le gusta, es muy raro que cambie de opinión. Suelo ser muy aferrada a las primeras ideas, a veces [ríe]. Este material es algo muy auténtico y nada sobrepensado. De hecho, no regrabé ninguna canción, porque casi siempre pasa que las vuelves a grabar una y otra vez hasta que suenan mejor, pero en este caso quise dejar esa primera versión como la final.
Con respecto al concepto, me parece que nació de forma súper orgánica, no lo pensé demasiado. Sabía que quería experimentar con un género que no fuera solo pop. Al final, el reggaetón cute, para mí, es pop urbano, así lo defino. Los EPs forman parte de esta nueva ola del pop.
Sí, y justo cuando estuve escuchando los dos EPs, hubo momentos que me recordaban mucho a los sonidos del pop de los 2000.
RD: ¡Totalmente! Es algo que está súper impregnado en mí, ¿sabes? Aunque no lo quiera provocar, sucede. Las melodías que hago a veces son súper Belanova; al final, era lo que escuchaba y está muy dentro de mí.
Yo desbloqueé un recuerdo [ríe], me acordé muchísimo del disco de Belinda, pero Belinda de los 2000, con su trencita en la frente [ríen].
RD: ¡Me encanta que me digas eso! Hace unos días le estaba enseñando justamente ese álbum de Belinda a mi novio y le decía que ese es mi trip. ¡Qué chido que lo pudiste notar!
¿Cuáles son las emociones que predominan ahora mismo en tu arte?
RD: Definitivamente la vulnerabilidad y la sensibilidad. Creo que también hay un poco de tristeza o miedo, y a la vez curiosidad y amor. Diría que es una mezcla de esas emociones, pero es algo que sigo descubriendo.
Y ahora mismo, ¿cuál es la música que te inspira? Esas canciones o artistas que no puedes parar de escuchar.
RD: Oh, llevo ya un par de semanas que no escucho otra cosa que no sea Charli XCX. Siempre llego tarde a los trends [ríe], entonces cuando fue la era BRAT, la neta casi cero la escuchaba, pero ahora estoy obsesionada. Me parece increíble cómo plasma tan literalmente lo que vivimos las mujeres. Estos días he estado analizando mucho las letras, tanto que ayer lloré con una rola suya [ríe]. Me siento muy identificada con ese álbum.
Te entiendo completamente. En marzo tuvimos el lanzamiento de ‘REGGAETON CUTE (VOL.1)’ y ahora, en mayo, salió ‘REGGAETON CUTE (VOL.2)’. ¿Cómo nació la idea de dividir el proyecto en dos volúmenes? ¿Qué crees que une y diferencia a cada uno?
RD: La idea original era sacar solo un volumen del EP, porque había estado lanzando sencillos y para mí era importante tener una narrativa dentro del proyecto, un concepto que pudiera escucharse de principio a fin y tuviera sentido. En el primer volumen, esa narrativa es bastante clara: la búsqueda de identidad y, mi yo del pasado hablándole a mi yo del presente, y viceversa. Fue un juego entre mis sentimientos y mis miedos.
En cambio, el nuevo EP fue un poco menos planeado en ese sentido, no tiene una narrativa tan directa, sino que es un poco más ligero. Quería sacar algo que fuera más divertido, ligero y sexy, porque también son sentimientos con los que me siento muy conectada a mis 22 años. Para mí fue súper importante mostrar esa parte de mí más allá de la oscuridad y la tristeza. Aunque el lanzamiento del segundo volumen fue más espontáneo, siento que todo se acomodó a la perfección y, al mismo tiempo, en el subconsciente estaba claro que hacía falta ese segundo material para complementar el concepto de mi música.
Es interesante poder ver la dualidad y los contrastes entre ambos materiales. Más allá de la música, con todo el rush de los lanzamientos, me imagino que también necesitas pausas y momentos que bajen un poco las revoluciones, ¿qué haces para reconectar contigo misma cuando no estás creando?
RD: Siento que en este momento estoy en esa búsqueda de reconexión conmigo misma. Me ayuda mucho ir a terapia. A veces, simplemente estar sin hacer nada, sentada en mi sillón, es algo que me da paz y con lo que siento que vuelvo a mí misma, ¿sabes? Y trato de no sentirme culpable por eso, porque hay tanto que hacer, tantas opciones, tanto en internet, que es fácil sentirse mal por no estar haciendo algo.

Creo que el internet y las redes sociales, con tantos estímulos, nos ponen un poco la trampa de pensar que debemos estar 24/7 haciendo cosas. Para ir cerrando con la charla, cuéntame, ¿qué canción tuya le recomendarías a alguien que te escucha por primera vez?
RD: Diría que la primera que deben escuchar es “Kyoto”, porque siento que representa muy bien el concepto que traigo, la lírica cute pero también el dembow. Y otra que recomendaría es “K BELLEZA” con Ervin River.
Esa fue mi favorita del nuevo material.
RD: Muchas gracias, ¡qué chido que te haya gustado!
Muchísimas gracias por tu tiempo y felicidades por estos lanzamientos. Personalmente conecto mucho con toda esta onda urbana, y ver cada vez más mujeres en estos espacios se siente súper chido.
RD: Mil gracias por tus palabras y por el tiempo de esta charla.
¡Nos vemos pronto!