Entrevista con Porches
Para Aaron Maine, mejor conocido como Porches, su nuevo álbum es una representación abstracta de los últimos dos años de su vida. ‘All Day Gentle Hold!’, su quinto álbum y el segundo en menos de dos años, es una eufórica explosión maximalista diseñada para escucharse fuerte y rápido. “No es optimismo total, no es pesimismo total, no es pura alegría”, comparte con Vibras. Es su álbum más cohesivo a la fecha, donde Maine muestra un dominio total de su arte, explotando sus mejores cualidades según su conveniencia y sintetizando sus emociones e ideas más complejas en pequeños destellos de menos de dos minutos.
En términos generales, ¿podrías contarme sobre el álbum y de cómo se escribió?
A: Me tomó cerca de un año y medio o dos trabajando con el material desde el último disco. Cuando escribo, por lo general, es solo una costumbre, nunca me siento y escribo un álbum, es más una rutina, y luego, cuando un par de canciones comienzan a sobresalir, comienzo a construir algo a partir de ellas y hacerlo cada vez más grande. Con este disco llegó “Lately”, luego llegó “Okay”, y se sintieron muy bien y muy diferentes. Así que seguí regresando a ellas y usándolas como referente para las cosas nuevas, así es como lo hago. Trabajo desde mi casa, así que me levanto, tomo un café, escribo un poco y lo trato casi como un trabajo. Simplemente dejo que todo se derrame e intento capturar lo que sea que esté sucediendo ese día y si funciona, bien, si no funciona, no funciona.
¿El último año un momento fue creativo para ti o fue difícil empezar a escribir de nuevo?
A: No, fue un momento creativo. Me sentí realmente bendecido y me sentí obligado a seguir haciendo arte y música, y eso me emociona a mi manera. Como estaba diciendo, es un ritual y puede ser muy curativo para mí simplemente meditar y concentrarme en eso. Cuando compongo, es como si me desconectara de todo. Y sentí que eso fue realmente útil durante ese tiempo, simplemente querer hacer cosas.
Muchas de las presiones que rodean la creación de música simplemente dejaron de existir, probablemente por eso se sintió mejor de lo que se había sentido en mucho tiempo. No sabía si tenía disquera o si mi booker me iba a dejar, estaba preparado para que sucediera cualquier cosa. No me sorprendería si un cometa golpeara la Tierra, ¿sabes? Así que fue realmente bueno saber que quería seguir haciendo lo que amo, sin importar si veía la luz del día o no. Me sentí afortunado de no estar demasiado aplastado o como si mi mundo se estuviera derrumbando, todavía encontré mucha alegría.
Es un sentimiento común últimamente, ¿no? Pensar, ‘okay, podríamos morir en cualquier momento. Hagámoslo’.
A: Sí, también la otra cosa es que puede ser un escape de manera positiva, pero también puede ser un escape de manera negativa si descuidas otros aspectos de tu vida. Fue como una combinación de ambos, ya sabes, es como taparte las orejas, solo estoy aquí haciendo mis canciones, es la cosa más tonta y más importante del mundo a la vez. Pero creo que he tenido una especie de malestar latente, no me he sentido muy creativo desde que terminé este álbum. Estuve todo ese tiempo diciendo 'esto tiene que salir este año, tengo que terminarlo', todo el día y ahora que está listo siento que puedo tomar un respiro y recomponerme, supongo, ver dónde quedamos todos.
¿Con quién colaboraste para este álbum?
A: Mi amiga Chloe Kohanski canta en “Swimming Big” y “Grab the Phone”, la acabo de conocer en Nueva York y vi que había publicado este pequeño clip de ella cantando una canción, me obsesioné mucho con ella. Nos hemos acercado mucho en los últimos años, y es como siempre ha sido, ¿sabes? Si estoy trabajando en algo y hay un amigo cerca, le diré “¿quieres venir?”, “intenta cantar esta parte”, “inventa una parte”. Amo tanto su voz, estoy muy feliz de que algunas de mis partes favoritas del disco sean cantadas por ella. También tiene su propio proyecto que lanzará pronto, una gran pieza musical, se llama Chloe MK.
Tienes un estilo y una estética muy particular, por eso quería preguntarte qué papel dirías que tiene la moda en tu presentación, interpretación y música.
A: Siempre me ha interesado y me ha importado lo que uso, cómo me veo y cómo me siento cuando uso ciertas cosas. Algunas personas simplemente tienen uniformes de por vida y les funciona, pero veo tantos atuendos y prendas en Nueva York... Siempre trato de moverle un poco para ver, sabes, qué corte de pelo se siente divertido, algo así. Lo disfruto. Me gusta tomar fotos y armar atuendos para mis conciertos.
Está integrado en mi vida de una manera muy orgánica, nunca ha sido “como me voy a ver así para grabarlo”, “voy a peinarme así e para verme como tal persona”. A lo largo del día encuentro pequeñas inspiraciones en las que, no sé, veo a mi vecina de 95 años bajar las escaleras y pensar “oh, mierda, esos pantalones son increíbles, ¿cómo puedo conseguirlos?” O veo un video de Nirvana y piensa “bueno, me gustan los jeans deshechos”, uno ve tantas cosas…
¿Qué emoción dirías que es fundamental para ‘All Day Gentle Hold!’?
A: Esa es una buena pregunta. No sé si hay un nombre para esa emoción, pero en general se siente como algo a punto de desbordarse. No es optimismo total, no es pesimismo total, no es pura alegría. No es una crisis existencial, pero siento que es el más rico emocionalmente. Para mí no está forzando nada, se siente como una pintura muy abstracta de lo que ha sido vivir y pensar en mi cuerpo durante los últimos dos años. Es probablemente el disco más positivo que he lanzado. Sobre las letras, muchas de ellas son muy abstractas o no tienen sentido literal, pero para mi evocan un sentimiento con el que me puedo identificar. Es una especie de confusión y desesperación parecida a la alegría, realmente no sé cómo llamarlo.
¿Qué esperas que tus oyentes en general obtengan de la experiencia?
A: Estoy muy emocionado de lanzar esto este año. Tiene mucho sentido para mí como un todo. Es corto, son 11 canciones, 26 minutos, así que realmente está destinado a ser escuchado fuerte. Creo que podría ser una verdadera celebración, si sale bien. Espero que a la gente le guste, siempre es difícil de saber pero, para mí todo, desde las canciones hasta las imágenes, parece haber venido del espacio colectivo más positivo hasta este punto en mi carrera. Siento que esa emoción y esa energía se traducirán, espero que podamos compartir eso como fans, ya sea en un concierto o escuchando en tu auto. No sé qué pensará la gente, pero estoy emocionado de compartirlo.
Sí, entiendo lo que quieres decir. Creo que tiene esa energía a la que te refieres, creo que funcionó.
A: Sí, quería que fuera muy digerible, no en el sentido de ser Muzak o simple, sino entregar estas canciones de la manera más satisfactoria posible. No le piden mucho al oyente, aparte de simplemente escucharlo fuerte. No es que requieran paciencia, creo que hay un momento y un lugar para eso, pero con este solo quería lanzarme con todo, la experiencia más maximalista que puedo ofrecer. Una experiencia alegre.
Entonces, ¿es por eso que cierra a los 26 minutos? ¿Corto y dulce?
A: [ríe] Así es como escribo las canciones, la gente siempre ha dicho que las canciones son demasiado cortas. No lo sé, solo me gustan las canciones cortas. 11 canciones se sintieron como un buen número, 26 minutos se sintieron como un buen número y así es como quiero escucharlas o cómo me suenan mejor. Al final del día lo único que puedo hacer es sacar lo que me suene mejor, y esperar que resuene. Pero sí, siempre creo que es divertido ir al grano, es más urgente, audaz y deliberado. En ese sentido, tal vez me esté volviendo demasiado autoindulgente.
¿El título del álbum tiene algún significado en particular?
A: No, es como las letras que en realidad no tienen sentido todo el tiempo, solo el sentimiento que evoca para mí. Aunque esa frase sí tiene un sentido literal, suena agradable que alguien te abracé gentilmente todo el día, pero también está muy cargado. Me encanta cómo suena y se ve y siento que explica el disco sin decir nada al respecto.