Entrevista con Chelsea Wolfe
Tras su laureada introducción al oído público vía ‘The Grime and the Glow’ (2010), la californiana se ha consolidado como una de las artistas más sólidas y multifacéticas del hard sound contemporáneo. Con siete álbumes de estudio, Chelsea Wolfe se ha permitido explorar géneros como el doom metal, neofolk, goth y electrónica. Líneas que llegan a un punto en común en ‘She Reaches Out To She Reaches Out To She’ (2024).
El séptimo LP de la cantante, cobijado por Loma Vista Recordings y producido por David Andrew Sitek (TV On The Radio), trae a nuevos territorios el cosmos interno de la artista. Quien nos habla de sus procesos de cambio, la ciclicidad inherente al día a día y las imágenes que han moldeado su impulso creativo a lo largo de estos años.
Hemos pasado ya un par de meses con las canciones de ‘She Reaches Out To She Reaches Out To She’ entre nuestras playlists. ¿Cómo te sientes, hoy por hoy, respecto al lanzamiento?
CW: ¡Muy bien! Me tomó un buen tiempo terminarlo y lanzarlo al mundo. Poder compartirlo finalmente es genial, me emociona comenzar a tourearlo.
Entiendo que empezaste a trabajar las primeras ideas rumbo al material en la primavera de 2020. ¿Cuáles son tus impresiones sobre estos casi cuatro años que dieron forma al disco?
CW: Bueno, para nosotros –y para muchas otras personas que querían llevar a la luz su trabajo– el tiempo extra producto de la pandemia fue realmente frustrante al principio. Ahora lo entiendo más como un regalo, esto porque pude darme más espacio para sentir las canciones. Yo misma cambié como persona y terminé reflejándolo en cada uno de los cortes, esa transformación es el centro del álbum.
¿Hubo algún evento en particular que dictara la dirección de esta era artística?
CW: En 2021 dejé el alcohol, fue entonces cuando comencé a exponer ese aspecto de mi viaje personal mediante la música. Esa evolución fue clave para explorar esta nueva etapa, marcó una especie de destino para él LP, lo hizo mucho más significativo de lo que planeé originalmente.
Creo que el cambio, como proceso nuclear, es uno de los temas principales en el material, pero el abordaje conceptual es distinto a lo que estamos acostumbrados. Hablas de él de una manera mucho más cruda, colocando a la destrucción a la cabeza del proceso. ¿Hubo alguna imagen que te guiara entre todas estas ideas?
CW: Creo que la imagen más obvia que existe en la naturaleza es la oruga; disolución y reconfiguración. Literalmente entra en un capullo, se disuelve y renace como algo completamente nuevo y diferente. Canciones como “House Of Self-Undoing” apuntan directamente hacia ese proceso, ese estar dispuestos a adentrarnos en la liminalidad y sus dinámicas.
Disolverse suena ya bastante intimidante, darle seguimiento es llevar la metáfora (y la sensación que la acompaña) un paso más allá.
CW: Pensar en disolverse es realmente aterrador para cualquiera, especialmente cuando nos concebimos alrededor de ideas como el ego o lo que sea. Creo que atravesamos por muchas de estas etapas de transformación. La que estoy atravesando es, posiblemente, una de las más grandes de mi vida. Forma parte de estas múltiples muertes y renacimientos de mí misma.
Dicho en plural parecería que cada redefinición personal es parte de algo más grande, una suerte de impresión periódica que envuelve nuestras vidas.
CW: Creo que este álbum refleja la naturaleza cíclica de todas las cosas, carácter muchas veces pasado por alto debido a nuestra tendencia por pensar linealmente. Creo que es muy común al hablar de nuestra experiencia o en procesos traumáticos. No es como que haya un punto estático y pacífico al que llegar, los problemas vuelven, reaprendemos a sanar, a buscar otras perspectivas. La vida no es ni remotamente lineal o binaria.
Sobre los otros puntos que propulsaron la creación de ‘She Reaches Out To She Reaches Out To She’, ¿tuviste alguna referencia para llegar a esta nueva sonoridad?
CW: Diría que el ‘Violator’ (1990) de Depeche Mode. Leí sobre cuando entraron al estudio y el productor (Mark Ellis) los incitó a usar más los sintetizadores, a obtener un sonido mucho más electrónico. Al principio se resistían un poco, pero ese empuje constante terminó por crear un sonido genuinamente poderoso. Yo también estaba emocionada y abierta a ese tipo de transformación en mi sonido. Sucedió de manera bastante natural gracias a la producción de Dave Sitek. Las canciones pasaron, casi inadvertidamente, de un rock puro a terrenos más eléctricos. Fue genial sentir y escuchar esta transición.
¿Qué hay de lo extramusical?
CW: Hay una ova de los ochenta llamada ‘Angel’s Egg’ (1985). Un amigo me la compartió hace algunos años y, desde entonces, se ha convertido en una de mis principales referencias visuales. La primera vez que la ví no tenía activados los subtítulos, así que la percibí como una experiencia estrictamente visual. Me concentré en esta chica que protegía un huevo misterioso, sin saber qué había dentro o su significado. Las posibilidades eran infinitas, entre la duda alrededor y la sensación de esperanza terminé por colocarlo cerca de mi core artístico. Esa imagen trajo toda esta nueva energía a mi vida en una etapa dónde no sabía exactamente hacia dónde iba, pero todo me emocionaba. Esta idea de dejar cosas atrás para dar espacio a nuevas posibilidades.
La otra vez pensaba en esta idea la multiplicidad y el cómo nos define. No podría reconocerme en muchas de las personas que he sido, pero no siento poder separarme completamente de ellas.
CW: Bueno, este disco trata de ese nexo con todas esas diferentes versiones de nosotros mismos. Mientras trabajaba en aceptar algunos puntos de mi pasado, me enfoqué en buscar un perdón para mí misma, para mis errores, para los giros equivocados que sentía haber tomado. Eso me condujo hasta un presente mucho más tranquilo, uno donde puedo coexistir con esa versión pasada de mí y dejarla ser sin juzgarle severamente. Creo que ahora es obvio que debía vivir todas esas situaciones para llegar a donde estoy ahora. Paradójicamente, me sentía realmente conectada con mi futuro.
¿De qué manera se manifestaba ese futuro?
CW: En las sesiones de terapia trataba de visualizar esta versión posterior de mí misma que me ayudara a avanzar. Realmente sentí que mi futura yo me guiaba para escribir estas canciones, para hacer los cambios intrapersonales necesarios para llegar a ella.
Pensando en la transformación, el pasado y el futuro, ¿cómo dirías que encajan dentro del despliegue sonoro al interior del LP?
CW: Cada corte muestra un aspecto diferente de este viaje, llevando como máximas el vivir la vida intensamente en vez de existir por existir. Hice mucho de esto último; estaba viva, creando, pero también usaba el alcohol como medio para rebasar mis propios límites. Me convertí en esta versión lejana y falsa de mí misma. Ahora quiero mi energía de vuelta, reclamar aquello que me empodera y poder seguir mi propio camino.
Camino que inicia con “Whispers In The Echo Chamber”.
CW: ¡Sí! Esa canción habla de todos estos pensamientos que revolotean alrededor de tu cabeza, susurrándote. La música es un intento por despertarte, un llamado a que te eleves dejando atrás aquello que te hunde. Ya sea una fuerza externa o narrativas mentales negativas. Aquí inicia el viaje al inframundo.
Después de este primer paso en firme, ¿qué track dirías que concentra la intención del resto del material?
CW: Bueno, más adelante en el tracklist se encuentra “Tunnel Lights”, invitándote a vivir genuinamente, a no desvanecerte en la insensibilidad. Debemos hacer un esfuerzo por no sólo rodear las cosas, sino atravesarlas con todo lo que eso implique. Esta es la única manera de soltar lo que hemos sido y crecer realmente.
Espero que este crecimiento se mantenga para ti y tu proyecto durante los años siguientes. ¿Cuáles son tus planes para el futuro cercano?
CW: Este año y el siguiente estarán llenos de conciertos. 2024 será principalmente para EE. UU. y Europa, tocaremos de arriba a abajo y de Este a Oeste. También comenzaré con las sesiones de composición para el próximo disco, esto cuando en mis pequeños ratos libres, ya sabes, aquí y allá. ¡Es bastante emocionante! Muero de ganas por volver a crear cosas nuevas.
Sería genial tenerte una vez más en México y escuchar algo de esa nueva música. Ha sido genial poder conversar contigo Chelsea, ¿algo más que quieras agregar para Vibras?
CW: Muchas gracias por hablar conmigo, realmente lo aprecio. Y sí, ¡también estoy deseando volver a México!
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