Entrevista con Bombay Bicycle Club
Bombay Bicycle Club nació en el ya distante 2005, en Crouch End, Londres. Formada por el vocalista y guitarrista Jack Steadman, el guitarrista Jamie MacColl, el baterista Suren de Saram y el bajista Ed Nash, la agrupación británica se mantiene como unos de los indie darlings favoritos de muchos amantes de la música contemporánea. Conocidos por su sonido pop-rock perfecto para pasar un buen momento en compañía, o bailando a escondidas por tu cuarto, así como por sus letras que hablan sobre las noches de sábado y mañanas de domingo. Desde su comienzo la agrupación se mostró energética con su álbum debut ‘I Had the Blues But I Shook Them Loose’, lanzado en 2009, el cuál denotaba su energía juvenil, talento crudo y una habilidad para crear himnos pegadizos impulsados por la guitarra. El álbum recibió elogios de la crítica y estableció a Bombay Bicycle Club como una prometedora fuerza nueva en la escena del indie rock. Le siguieron una serie de álbumes exitosos, incluyendo ‘Flaws’ (2010), ‘A Different Kind of Fix’ (2011) y ‘So Long, See You Tomorrow’ (2014), afianzando aún más su reputación como una banda capaz de evolucionar su sonido mientras mantiene su estilo distintivo.
Sin embargo, después de un receso en 2016, los miembros de Bombay Bicycle Club buscaron sus propios proyectos musicales individuales, lo que les permitió explorar diferentes caminos creativos. Durante este tiempo, Jack Steadman lanzó material en solitario bajo el nombre de Mr Jukes. Por otro lado, Ed Nash lanzó su propia música como Toothless. A pesar de sus esfuerzos individuales, los miembros de la banda nunca perdieron de vista su visión colectiva y, en 2019, anunciaron su triunfal regreso con el lanzamiento de su quinto álbum de estudio, ‘Everything Else Has Gone Wrong’.
Con un renovado sentido de propósito y una perspectiva fresca, Bombay Bicycle Club continúa cautivando a las audiencias con sus letras introspectivas, melodías cautivadoras y producción innovadora, por lo que tienen previsto un fantástico regreso para octubre de 2023 con su disco ‘My Big Day’, lleno de colaboraciones, las cuales incluyen a Damon Albarn, Holly Humberstone, Nilüfer Yanya y Jay Som.
Platicamos con Jamie MacColl sobre su nuevo single, el cual lleva por nombre el mismo que su álbum. La historia de esta canción tiene una temática, McColl explica: “Muchas de nuestras canciones suelen ser muy vagas, y no necesariamente sobre algún tema en particular, pero esta trata sobre el cumpleaños que tuvo Ed (Nash, bajista) el año pasado. Él es muy introvertido, y todo lo que quería era estar solo. Habla un poco de no vivir bajo las expectativas de la sociedad”.
En cuanto al proceso creativo para crear las letras de las canciones, Jamie nos cuenta que todo comienza con Jack, quien posteriormente presenta el trabajo al resto de la banda. “Jack es de mente muy abierta en cuanto a sus letras, creo que otros escritores serían muy celosos de que nadie cambie nada en su trabajo, pero él siempre está dispuesto a colaborar con otros cuando se trata de su propio trabajo”, menciona.
Leí que Jack ya ha colaborado antes con Damon Albarn en una orquesta, ¿Cómo surgió su colaboración para este disco y por qué les pareció que Damon era el correcto para el track “Heaven”?
JM: Jack ya había trabajado en diferentes proyectos con él, incluso en una orquesta del oeste de África que tuvo lugar en París. Cuando estábamos trabajando en los demos del disco el año pasado pensamos en mostrarselos a nuestros conocidos. Jack le mostró nuestros demos a Damon y “Heaven”, que estaba a medias aún, fue terminada por él. Tomó una guitarra acústica y comenzó a escribir unos versos y resultó en la versión final de la canción. Fue algo que se realizó muy en el momento, lo que le da un encanto.
Además de Damon Albarn, la banda colabora con la talentosa cantante Holly Humberstone, James nos explica lo que más le gusta de ella como artista: “Amo su voz, en la canción “Diving” siento que sus vocales se mezclan perfectamente con la voz de Jack, es muy fácil trabajar con ella, ha hecho un gran trabajo y ha sido un verdadero sueño colaborar”.
Leí que la prensa inglesa alguna vez calificó su música como: “Canciones sobre noches de sábado y mañanas de domingo”. ¿Crees que aún es así? ¿Qué quieren contar ahora con sus canciones?
JM: Es un quote muy gracioso. Jack y yo nos hemos convertido en padres respectivamente en estos pasados dieciocho meses, así que creo que ahora las canciones ya no se tratan sobre las noches de sábado, solo sobre las mañanas de domingo. Creo que muchas de las letras han cambiado mientras hemos madurado, los primeros dos discos hablaban sobre ser adolescentes porque éramos muy chicos, no queremos ser como Blink-182, están en sus cuarentas y aún siguen escribiendo canciones sobre ser adolescentes. Hay una canción en el nuevo disco que de hecho habla sobre ser padre, creo que es mi canción favorita de todo el disco. Pienso que debemos de seguir escribiendo sobre nuestras experiencias conforme nuestra vida va cambiando.
MacColl explica que el álbum no es un disco conceptual y agrega: “En el disco no rechazamos una idea solamente porque no suena a algo que no habíamos hecho antes, tratamos de ir más lejos y por lo alto en lugar de quedarnos en una zona de confort, ese fue el principio del disco más que cualquier inspiración lírica”.
Han estado en la escena musical desde el 2008, ¿Cuál es el motor que los sigue inspirando a crear nueva música?
JM: Siento que es el simple hecho de estar vivos y tener algo que compartir con la gente.
¿Qué tan lejos de su zona de confort fueron?
JM: Hay canciones que son mucho más instrumentales definitivamente, no suenan a una banda de cuatro integrantes tocando, son un tanto más psicodélicas. Pero también hay canciones como “My Big Day” que son muy simples y directas, muy diferentes al resto de nuestra música.
Desde el 2020, Bombay Bicycle Club ha tenido múltiples sold-outs en un recinto muy icónico: el Alexandra Palace. James menciona que su parte favorita de tocar ahí es que creció a tan solo cinco minutos del recinto, siempre podía verlo desde la ventana de su cuarto, así que siempre fue su sueño adolescente poder tocar ahí. Si MacColl pudiese darle un consejo a su yo del pasado sería el no preocuparse demasiado en cuanto a las canciones, en especial en vivo, ya que realmente no importa si te equivocas un poco, al final nadie se da cuenta, y es solo una realidad sobre tocar en vivo.
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