Entrevista con Javiera Mena

El sueño de todo artista es llegar al estrellato, alcanzar la cúspide y volverse un ícono en su rama. En este caso, hablamos de una institución muy importante no sólo en la música, pues Javiera Mena, lejos de ser un estandarte en el electro pop latino, es una referente de la libertad sexual en toda Latinoamérica. Sus medallas se cuentan por montones, y su más reciente trabajo, el cual es la versión deluxe de su último EP, se agrega al largo historial de victorias a lo largo de 10 años como cantante y compositora.

Hablamos con ella sobre su experiencia durante la pandemia, el desarrollo de sus canciones a lo largo del tiempo y su más reciente sesión musical en A Colors Show. Lanzaste el EP 'I. Entusiasmo' hace un año y ahora nos entregas el remix, un relato de cuarentena y desamores, pero en tachas. JM: Le puse una tacha a la computadora (risas). Eso fue hecho para darle un vibe diferente. Me gusta cuando las cosas traen regalitos, cosas deluxe. Para esto subí a distintas personas al barco, gente que admiraba, lo que yo hago en mi carrera musical es inspirarme de otros artistas, lo que resultó en este EP. Además, hubo una libertad creativa enorme, ya que deje a los colaboradores hacer lo que quisieran. Confiaba en ellos, entonces cuando tengo esa confianza les otorgo ese poder. Y con el remix de tu EP, además de explorar nuevas sonoridades, lo describes como la versión más pride de tu material original. ¿A qué se lo adjudicas? JM: Sí es muy pride, pero canciones como “Diva” son un emblema del movimiento, onda para bailar en la discoteca. Aunque todo lo que yo hago es un poco pride, porque soy un icono gay. Soy lesbiana, así que ya no puedo ser más pride que eso. Llegaste a Colors, una de las sesiones más importantes del mundo. ¿Qué era lo que más te pasaba por la mente en camino a grabarlo? JM: Me sentía bien, estaba muy segura de mí misma. Si por ejemplo, hubiera hecho la sesión de Colors hace tres años, quizá hubiera estado muy insegura, así que esto llegó en el momento que tenía que llegar, en una época donde me siento con mucha confianza. Y en general, el equipo detrás de las sesiones es súper humilde, son excelentes. A veces, uno encuentra gente muy capacitada para hacer las cosas, pero son medio neuróticos. Sin embargo, acá todos eran artistas top pero con los pies bien clavados en el suelo, así que eso me hizo estar muy relajada. Estaba nerviosa, no te lo voy a negar, pero me sentía bien.

¿Cómo te imaginabas esa sesión?, ¿fue justo como pensabas que sería o te dieron la vuelta? JM: No, yo me imaginaba que íbamos a grabar todo en algún edificio así super top en Berlín, pero en lugar de eso fue en una fabrica en un campo, súper hippie la onda. No se pueden tomar fotos porque de esa forma mantienen el misticismo pero tres de las cinco personas hablaban español, así que me sentí muy en casa. Muy de mi onda. ¿Cuál es tu sesión de Colors favorita? JM: Me gustan varias, pero la de Lido Pimienta me gusta mucho, le está yendo muy bien a mi comadre, anda en Nueva York ahorita y me gusta mucho. Tambien Chilly González está increíble y por último la de Pimp Flaco, está muy buena.

Actualmente a tu música se le considera un imprescindible para entrarle al electro pop latino, y es que sí, incluso hay una nominación al Latin Grammy hace un tiempo que lo confirma. ¿Cómo fue leer tu nombre en dichas nominaciones?

JM: Fue una maravilla, porque eso te deja en un lugar increíble. Lamentablemente este año no se armó, pero a raíz de esa pasada nominación se me abrieron muchas puertas en Estados Unidos. Mí nombre retumbó por allá y bueno, yo continúe trabajando, porque el estar nominada a los Grammy no te asegura la gloria, debes de seguir trabajando.

Para muchos artistas alrededor del mundo la pandemia fue algo desmotivante, depresiva si la quieres ver así, pero ¿Cómo tú manejaste la situación en los primeros meses?

JM: Al principio estaba igual que todos, me sentía deprimida y no sabia que iba a pasar, pero poco a poco me fui dando cuenta que esto era un proceso el cual había que tomarlo como un aprendizaje. Y pues sí, hice un disco en pandemia y seguí trabajando, así que mi equipo y yo hicimos un buen trabajo estando en pandemia.

Durante este tiempo encerrados has estado muy activa, pareciera que la pandemia le echo más gasolina al motor de tu música, ¿cómo describirías estos beneficios, si se pueden llamar así, de estar en cuarentena?

JM: Me permitió focalizarme más, darme cuenta de que las cosas no tienen que hacerse tan rápido y que necesito tiempo para todo, no debo de andar acelerada. Por ejemplo, cuando estás de gira pierdes un poquito la noción de hacer las cosas detalladamente. También me sirvió para dormir y descansar, fue bonito en ese sentido a pesar de que estar en pandemia es una putada, pero ahora logré valorar mejor las cosas.

En julio tuviste un concierto virtual con el Centro Cultural España en el marco del pride, y en general eres una de las artistas latinas que tiene mayor proyección respecto a la libertad sexual y todo el movimiento, ¿cómo has notado esta apertura a lo largo de los años?

JM: Yo he notado que pasó de algo prohibido a convertirse en una moda, o como algo muy bien visto. Recuerdo que ver el aeropuerto de la CDMX decorado con el pride, casi como si fuera navidad, me hizo pensar en como antes podía ser hasta un insulto, pero ahora las marcas mas grandes del mundo se han unido a este movimiento y es algo loquísimo. Pero sí he notado esta evolución, por ejemplo, en este ambiente siempre ha habido mucho hombre y pocas mujeres, y las lesbianas cada vez más tienen más espacio en la música, en las películas y en todos lados. Yo he vivido esa evolución, como artista y como lesbiana y ha sido buenísimo verlo, ahora somos un bien muy preciado, aunque falta mucho.

Con más de 10 años haciendo música, ¿se vuelve más fácil o más difícil la creación de canciones?

JM: Más complicado. Al principio todo es un papel en blanco, pero después se te acaban los temas. Yo creo que ya le hice una canción a casi todas las cosas dentro del romanticismo, que es en donde uno se mete y cada vez es más complejo, por eso me gusta colaborar con más personas y retroalimentarme. Todos mis discos anteriores han sido composiciones 100% mías y ahora empecé a componer con otras personas, lo que me llena de inspiración y de nuevas formas de ver las cosas.

¿Cómo podrías describir esta nueva etapa en la que te encuentras?

JM: Me siento arriba de mi corcel, totalmente. Ocupando el lugar, con mucha confianza. Estoy en una buena etapa y cosechando, si fuera una carta del tarot sería el seis de bastos. Me gusta mucho el tarot.

Los shows volvieron, y ya le entraste a algunos. ¿se viene un tour ahora de este lado del mundo?

JM: Yo creo que el otro año armaré un tour por Estados Unidos y México, ahorita ando en una gira por España y por fin se quitaron las sillas, la gente ya puede bailar y es algo que hacia mucha falta en mis shows porque son pura bailadera. Mis canciones en vivo son una fiesta, así que era terrible estar tocando con la gente sentada, casi casi me iba a poner a tocar un acústico. Ahora por fin estamos gozando.