Entrevista con Charles Spearin

Lo bueno toma tiempo, eso es un hecho. Sin embargo, dicha filosofía es olvidada por la mayoría de los artistas modernos, ya que nos bombardean con uno, dos o más discos por año. Y aunque se agradece, a veces esta puede perder su esencia. En este caso, Charles Spearin, ídolo canadiense por bandas como Broken Social Scene o Valley of the Giants nos presenta su segundo disco de estudio, tan sólo 10 años después de su primer material solista.
My City of Starlings, un álbum instrumental creado a partir de un club de música, caminatas por la alucinante Toronto, la libertad de crear sin pensar tanto y la pelicular característica de una inusual especie de aves: lo que arroja como resultado una pintura sonora que no teme a mezclar muchos colores.
Felicidades por My City of Starlings, lo escuché justo antes de ir a dormir y se convirtió en una experiencia muy interesante, parece que los discos instrumentales me arrullan.
Charles: Sí, es lo que me han dicho. Definitivamente algunas de las canciones son buenas acompañantes para ir a dormir.
Este disco no es un álbum pandémico, por llamarlo de alguna forma. Al contrario, muchas de estas canciones fueron escritas hace años, ¿cómo llegaron hasta nuestros tiempos actuales?
Charles: En realidad, yo diría que varias canciones si fueron echas en pandemia, aunque en general los temas estuvieron dando vueltas durante muchos años. Tal es el caso de “Rutting Season”, esa fue la primera canción que escribí en 2017, aunque estuvo mucho tiempo guardada y ahora me da gusto que por fin haya salido. De hecho, muchos temas salieron de un club llamado The group of musicians from around the world, donde hay artistas de Nueva York, Los Ángeles y Europa. En este grupo, todos los que formaban parte tenían que escribir una canción de forma diaria y eran enviadas. Pero, si no terminabas tu rola a tiempo, te echaban del grupo. Esto te fuerza a sobreponerte a tus dudas, lo cual es muy bueno., siento que te muestra a ser más seguro en tus decisiones, fue una buena experiencia. Por ejemplo, con Broken Social Scene acostumbramos a sobre pensar todo y analizar muchísimo las cosas, lo que se traduce en un disco cada mil años. Sin embargo, para este nuevo proyecto muchas de las ideas surgieron de forma espontánea, se sintió muy natural, estaba aprendiendo sobre mí mismo. Pero volviendo al club, envié mis canciones y posteriormente busqué a músicos que quisieran tocarlas conmigo, aunque muchos de los instrumentos son tocados por mí. Escribí la mayoría de las canciones en un mes, pero me llevó meses modificarlas y hacer que sonaran bien.
Me gusta lo del club, aunque suena algo rudo que te echen si no terminas tu canción.
Charles: Sí, un poquito, pero todo es amistoso, todos entienden que el punto es no sobre pensar y dejarte llevar por tus instintos.
Con la inclusión de más personas en los instrumentos, describes este proceso como si My City of Starlings fuera una pintura, y cada artista invitado dio una pincelada, que arrojó como resultado este disco, ¿cómo fue la experiencia de trabajar con ellos?
Charles: Hubo muchos invitados y casi con todos ellos trabajé de forma remota, sólo les enviaba la canción y les daba una descripción sobre ella, pero no sobre cómo tocarlas, sino acerca del mood que buscaba formar, por lo que dejaba que ellos se hicieran cargo de las melodías y demás. En este caso, como si fuera una pintura, si hacia falta algo de amarillo alguien iba y le agregaba un poco más. Todos los artistas que colaboraron son muy distintos entre sí, pero me alegra que hayan sido parte, ya que respeto mucho el trabajo de cada uno de ellos.
Tu disco es una oda a los pájaros llamados Starlings (Estúrnidos), un tipo de ave que puede replicar casi cualquier sonido ¿pero cómo fue la primera vez que los escuchaste?
Charles: Hay muchas de estas aves en todo Toronto, pero reconozco muy bien el sonido que hacen. La primera vez pasé debajo de un árbol, el cual estaba lleno de Starlings y hacen un sonido increíble. Después de eso comencé a hacer toda una investigación sobre ellos y pueden imitar a otras aves y personas, les puedes enseñar a hablar. Entonces, cuando están en parvada, se hablan entre ellos, pero no sabes que dicen. Son pájaros increíbles, me recuerdan a la comunidad artística de Toronto, en donde todos estamos aprendiendo de todos y nos copiamos un poquito, pero nadie está liderando realmente, nos movemos todos juntos. Esto lo vi como una forma poética de describir a la gente, en donde todos nos mantenemos cerca, pero nadie sabe realmente a donde vamos.

La suma de estos elementos dio como resultado el álbum, pero además hay otro elemento importante y es que te gusta mucho caminar por Toronto, lo que influenció mucho este material. ¿Prefieres caminar de día o de noche?
Charles: Me gusta caminar a todas horas, aunque prefiero cuando hay luz. Por ejemplo, ahora en pandemia no podías ir a ningún lado a platicar, llámese café o lo que sea, entonces ya fuera por mí cuenta o con algunos amigos salíamos a caminar alrededor de la ciudad para realmente observar la naturaleza que rodea a Toronto, porque es como un bosque. O sea, la ciudad es enorme, pero al mismo tiempo mucha naturaleza la rodea, es un lugar único en el mundo. Pero cuando no había nada que hacer, sólo quedaba caminar y observar las aves. La pandemia hizo que viera mi ciudad como un lugar donde la naturaleza toma mucho protagonismo.
En estas caminatas, ¿cuál era tu spot favorito?
Charles: Hay muchos lugares. Uno es un parque que descubrí recién en Ontario, el cual se llama Coronel Samuel Smith. Está un poco fuera de la ciudad, pero es increíble porque todas las aves que vienen desde México o Estados Unidos pasan por ese lago y aterrizan en ese parque. Es un lugar asombroso, cuando lo descubrí sentí que estaba en un oasis.
Hablando sobre México, la última vez que viniste fue con Broken Social Scene en 2019, ¿fue su último show antes de la pandemia?
Charles: Sí, esa fecha en México fue la última que tocamos juntos. En este momento un festival no se ve muy viable, acá en Canadá no se puede. Si acaso hay algunos shows, pero son muy restringidos y son al aire libre, pero seguimos aislados, esencialmente. Muero de ganas por tocar un show de nuevo, no he hecho eso en 2 años.
Seguramente es complicado, pero ahora que Mi City of Starlings se publicó, ¿qué vamos a poder ver en lo que resta del año?
Charles: No lo sé, relaciono la salida del álbum con lanzar aves hacia el cielo: sólo dejas que las cosas pasen y que lleguen a donde tengan que aterrizar. No tengo planes de tocar en vivo por ahora, aunque algunas de las canciones podrían ser tocadas con Broken Social Scene, es algo común que toquemos canciones de nuestros demás proyectos. Pero por lo mientras, sólo quiero seguir escribiendo, tengo muchas ideas todo el tiempo y es lo bueno de haber lanzado este disco, porque así ya puedo pasar a lo siguiente.